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domingo, 19 de diciembre de 2010

LAS PATADAS DEL KUNG-FU, por el G.M. Doc-Fai Wong

Training for Life
Inside Kung Fu Magazine November 1990

Todo el material fotográfico complementario que se ha incluido en este artículo así como los pies de foto explicativos han sido realizados por la Escuela Hung Sing Dragón Blanco y se ha añadido por inciativa  propia simplemente para intentar clarificar el contenido.


Quienes conocen bien la historia del Karate, saben que el arte marcial llegó a Okinawa de la mano de comerciantes procedentes de la provincia china de Fukien. También sabrán que, hasta hace poco tiempo, tanto los estilos de Karate japoneses como los de Okinawa contaban únicamente con dos o tres tipos de patadas: la patada frontal, la patada lateral y una mezcla de las dos anteriores similar a una patada circular.

Todas las patadas en salto, en giro y en gancho que se ven actualmente en lo sistemas coreanos y japoneses no existían. Menciono esto porque las artes marciales tradicionales del Sur de China aún tienen unas pocas patadas solamente (Fukien se considera en el Sur de China). Incluso algunos sistemas del Norte de China que poseen muchos mas tipos de patadas no contemplan las patadas circulares, en salto o girando del Taekwondo. El Karate actual y estilos de wushu de la China continental han tomado prestadas esas patadas de sus vecinos coreanos.

El viejo dicho que afirma que los estilos de kung-fu del Norte patean alto y que los del Sur lo hacen bajo no siempre es cierto. En el Choy Li fut pateamos tan alto como los practicantes de los estilos Shaolin del Norte. La realidad es que si puedes patear alto, podrás patear bajo fácilmente. Sin embargo, sólo porque alguien pueda administrar demoledoras patadas bajas no significa que pueda patear alto con éxito.  No es necesario ser flexible para patear bien pero si para patear alto.

En realidad, muchos estilos norteños de Kung-fu aplican sus patadas a las zonas inferiores del cuerpo del oponente. Las patadas más altas del Tai Chi se dirigen a la cadera del contrincante. Hsing-I y el estilo de la Mantis Religiosa también lanzan sus patadas bajo. Patear tan alto como sea posible en las formas es sólo una práctica común para desarrollar la máxima flexibilidad y fuerza.

En el sistema Choy Li Fut Kung-Fu existen cuatro patadas básicas que son versiones de las mismas patadas empleadas por la mayoría de los estilos chinos tradicionales de artes marciales. Esas cuatros técnicas son la patada frontal, la patada lateral, una patada llamada Ding Guek parecida a una patada circular corta que impacta con la punta del pie, y una mezcla entre la patada lateral y la frontal que algunos denominan patada de empuje inclinada. Todas ellas son patadas bajas, con el objetivo por debajo de la cintura.

Las patadas frontales del Kung-fu utilizan la punta del pie para impactar en los genitales del oponente, el metatarso para objetivos situados en el abdomen y el talón contra la articulación de la cadera.

 Sifu Javier Marcos demostrando la patada frontal con el empeine dirigida a los genitales. Es una técnica muy simple que se realiza elevando la rodilla y extendiendo después la pierna para impactar en el contrincante.

Hay dos tipos de patadas frontales. Uno de ellos es una patada de empuje, directo hacia el frente, usando el metatarso o el talón como superficie de golpeo. El otro es una patada en elevación, como una patada a la ingle donde la punta del pie o su parte superior (metatarso) se dirigen hacia arriba, directo al objetivo.

 Sifu Javier Marcos ejecutando Dan Gueuk o patada frontal penetrante, impactando con el talon en este caso. La rodilla se eleva todo lo posible pegando el muslo al torso para después extender hacia delante la pierna en una tractoria ligeramente elíptica, como si fuesemos a dar un paso largo, con intención de aplastar el objetivo. Una ligera inclinación del tronco hacia atrás favorece el impulso. Los brazos se mantienen arriba sin descuidar la posición de guardia.

Las patadas laterales bajas tienen como destino puntos especialmente sensibles en el muslo, la rodilla o espinilla del oponente.

Las patadas laterales donde el cuerpo gira 90º o más se convierten en patadas hacia atrás. En el Choy Li Fut se las llama Fu Mei Guek o Patadas de Cola de Tigre. Siguen siendo, básicamente, patadas laterales.

En esta foto Sifu Javier Marcos demuestra Dan Tsung Gueuk, también conocida como Fu Mei Gueuk. Nuestro costado se enfrenta al oponente y se eleva la rodilla todo lo posible. A partir de ahí, la pierna se extiende vigorosamente, basculando la pelvis para poder conseguir altura. Es muy importante que la zona de impacto del pie, que recomedamos sea el talón para favorecer la estabilidad del tobillo, apunte en línea recta al objetivo para que al patada se desplace siguiendo esa trayectoria.

La patada semicircular o Ding guek suele materializarse en un puntapié a puntos de presión en la cara interna del muslo o la parte posterior de la rodilla.

 Sifu Javier Marcos realizando Ding Gueuk. Esta patada circular es como un latigazo que busca impactar con el metatarso en zonas especialmente sensibles como la cara interior del muslo en este caso, genitales, hígado, riñones, etc.,

 Otra patada circular importante en el sistema es Sow Gueuk, que impacta con la tibia. Para mayor información sobre esta técnica nos remitimos a la Serie técnica 10 publicada en este espacio web (hacer click en el enlace).

La patada de empuje inclinada es una patada con el lateral del pie, enfocada transversalmente y delante del pie de apoyo del practicante. Es una patada descendente, dirigida a la parte inferior de la pierna del contrincante.

 
En la foto de arriba Sifu Javier Marcos muestra Jop Gueuk, una patada lateral descendente que se realiza normalmente con la pierna adelantada para "frenar" al contrario. Es una patada que se ejecuta sin preparación para evitar que el oponente lea nuestras intenciones y cuya trayectoria descendente se ve reforzada por la flexión de la pierna de apoyo. La inclinación simultanea del tronco hacia atrás puede servir de esquiva permitiendo aplicar el principio de sincronización de  defensa y ataque.

Otra vez Jop Gueuk, pero ahora Sifu Javier Marcos se ha desplazado lateralmente para atacar desde ahí la articulación de la rodilla, desequilibrando totalmente al adversario y causando severos daños.

Aunque a la hora de utilizarlas en la realidad la mayoría de las patadas de las Artes Marciales Chinas tradicionales son bajas, de cara al entrenamiento se realizan lo más alto posible buscando la máxima potencia. Los competidores en Torneos de Kung-fu y los artistas del Wu-shu a menudo añaden técnicas en salto a su repertorio de patadas para conseguir llamativas actuaciones. No hay nada malo en ello siempre y cuando se tenga presente que ya no se trata de patadas del estilo original de Kung-fu.

A diferencia del Tae Kwon Do que se basa primordialmente en las técnicas de pierna frente a las de puño, los sistemas chinos del Sur sólo utilizan patadas contra la parte inferior del cuerpo en situaciones de agarre, de cuerpo a cuerpo, donde las manos están ocupadas en la defensa.

 Ahora Sifu Javier Marcos aplica Yeung Gueuk o patada invertida. La rodilla se eleva por encima de la cintura y la pierna se extiende explosivamente en diagonal hacia abajo, impactando el talon o la zona media de la planta del pie al tiempo que se flexiona la pierna de apoyo para aumentar la estabilidad. Fijarse que el pie se gira para que los dedos apunten hacia el exterior. El objetivo es la rodilla, la tibia o el tobillo.

Aplicación de Yeung Gueuk de forma aplastante en una de esas situaciones a las que alude el G.M. Doc-Fai Wong en su artículo, en las que las manos estan ocupadas desahaciendo un agarre en distancia de cuerpo a cuerpo.

Por supuesto, podríamos preguntarnos por qué no se usan más patadas, teniendo en cuenta que las piernas son más fuertes que los brazos.
Es cierto; hay un dicho en las artes marciales chinas que podría traducirse así: “Las manos proporcionan el 30 por ciento de nuestra potencia y las piernas el 70% restante”. Sin embargo, ese dicho continúa de esta forma: “La pierna conlleva un riesgo del 70%”. Es decir, que existe una probabilidad del 70% de perder el equilibrio al permanecer sobre una pierna pateando. Ante esta posibilidad, la mayor parte de las Artes Marciales Chinas, eligen patear sólo como último recurso.

Agradecer a David Lopez su colaboración realizando las fotos que ilustran este artículo y a Jorge Vindigni su ayuda como sparring durante la sesión fotográfica.

2 comentarios:

  1. muy buen articulo! se agradece el ke lo hayan compartido, fue muy ilustrativo y respondio muchas dudas que tenia

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