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jueves, 31 de marzo de 2011

MEJOR POCO Y BUENO: Corolario de la Ley de Hick

Hasta este momento, y salvo excepciones, era un poco reacio a publicar artículos que contuvieran opiniones o conclusiones personales pese a que incluso mi propio Sifu me animaba a ello. Me he decidido a variar ese rumbo en esta ocasión y he escrito esta pequeña crónica en la que aderezo información estrictamente científica (la Ley de Hick) con experiencias y conclusiones propias. Parece ser que la Ley de Hick no es un concepto nuevo en el mundo de las AA.MM. Pero hasta ahora, para mí sí que lo era. Y lo que más me ha impactado es constatar cómo a través de mi vivencia personal he llegado a conclusiones similares. Espero que os sea útil.

La verdad es que lo intuía. Bueno, en realidad lo he podido experimentar personalmente. Veréis, durante el periodo de preparación intensiva de mi examen para cinturón negro, comencé elaborando varias defensas alternativas para un mismo ataque.
Es decir, por ejemplo, ante un agarre de muñeca en espejo trabajé varias técnicas de chin-na sobre la muñeca de mi agresor para liberarme. Seguí la misma linea de trabajo para ataques de puño, patadas, etc.. Asimilada la técnica correcta, tenía que trabajar el tiempo de reacción ya que en el examen de Cinturón Negro el Tribunal únicamente determina el tipo de agresión que tienes que defender pero no cuándo. Me explico: el Tribunal señala a los aspirantes que van a desempeñar el papel de agresores el tipo de ataque que deben realizar; si con un puñetazo, con una estrangulación, con una patada,… y a partir de ahí tu oponente ataca cómo y cuando quiere; en caso de un ataque de puño puede lanzar un jab arriba, abajo, crochet, etc., de manera que, aunque sepas la clase de ataque a recibir (que hay que reconocer que ya es mucho), el tiempo de reacción sigue siendo una variable a tener en cuenta. Y de que manera, porque allí no se puede esperar mucha colaboración del que tienes delante atacándote. Por lo menos, si no es de tu Escuela.

Pues bien, yo me percaté que a medida que iba incorporando técnicas y defensas a mi arsenal mis tiempos de reacción eran inferiores que cuando sólo había trabajado una sola, con independencia, claro, del grado de pulcritud y eficiencia con que fuera capaz de ejecutarla. Ahí me di cuenta de que algo no iba bien; sin duda, era un problema grave no sólo para superar mi examen sino también de cara a lograr ser efectivo en una situación de defensa personal real.

Al final, lo que hice fue elaborar un catálogo de posibles agresiones: jab directo, cruzado, crochet, agarre de muñeca en espejo, con la misma mano, estrangulación por delante, etc., y sistematizar la respuesta a cada una buscando las técnicas mas directas y eficientes, a mi juicio, de entre las que conocía en ese momento. Pero sólo una técnica defensiva por tipo de ataque. Mi tiempo de reacción mejoró notablemente.

Pues bien, cual es mi sorpresa cuando pasado el tiempo, investigando para un curso de defensa  personal  que voy a impartir en breve, descubro la LEY DE HICK. La Ley de Hick, también conocida como Ley de Hick-Hyman, es una teoría sobre el movimiento o reacción humanos que, básicamente, establece que el tiempo que se tarda en tomar una decisión aumenta a medida que se incrementa el número de alternativas.

Hick fue un investigador que en los años 50 descubrió que “como el número de opciones de respuesta (técnicas) aumenta de una a dos, el tiempo de reacción aumenta en un 58%”. Esto último condujo a la mencionada Ley de Hick de tiempo de Reacción/Respuesta. Ella declara que “el tiempo de reacción aumenta considerablemente cuando uno debe decidir cual respuesta o técnicas es más apropiada para la amenaza”. Por ejemplo, en 1.993 un investigador (Ferrara) probó la Ley de Hick y encontró que el tiempo de reacción de un solo bloqueo a un puño fue de 183 milisegundos. Cuando cuatro bloqueos diferentes fueron dados como opciones, el tiempo de reacción aumentó a 481 milisegundos.
Según esto no se deben trabajar múltiples defensas (respuestas) para un determinado tipo de ataque (estímulo).

Recapitulemos para que quede claro: según esa ley el tiempo de reacción (respuesta) promedio para un estímulo es de medio segundo aproximadamente. Si incorporamos una segunda técnica (respuesta) para la misma agresión (estímulo) nuestro tiempo de reacción se incrementará en un 58%. Y, precisamente, lo que queremos es disminuir ese tiempo de reacción, no incrementarlo. Si entrenamos múltiples defensas a un ataque específico, nuestro cerebro se demorará en optar por una de ellas. Y esa demora puede significar la diferencia entre volver a casa sanos y salvos o terminar en el suelo sangrando… o algo peor.
Como aval de la Ley de Hick basta decir que esta premisa se tiene muy en cuenta en sistemas de combate de corte militar.

Sin embargo, esto no debe llevar a equívoco. Creo que como instructores debemos conocer y saber aplicar diferentes alternativas defensivas ante un mismo ataque. Primero porque lo que funciona para un estudiante puede que no lo haga para otro. En mi corta experiencia como instructor ya me he encontrado con algún alumno para el que era totalmente imposible aplicar una técnica. Dejando a un lado mi responsabilidad en ello (quien sabe, es posible que no haya sido capaz de transmitirla adecuadamente), sí que es cierto que ese mismo alumno ha sido capaz posteriormente de utilizar con eficacia otra técnica totalmente diferente que le había propuesto como alternativa. Y es que lo que es bueno para mí, es posible que no lo sea para ti.


Además, creo que no existe la "técnica perfecta", ese Santo Grial que buscan muchos artistas marciales. Todas las técnicas tienen sus puntos fuertes y sus puntos débiles y un instructor debe saber cuáles son y darlos a conocer a sus alumnos. Pero, una vez realizada la adecuada criba, no creo que debamos tejernos una maraña mental y sí centrarnos en la práctica y perfeccionamiento de unas pocas. Después todo, esta claro que yo puedo automatizar A ó B pero no las dos acciones a la vez.

La clave no está en coleccionar un montón de técnicas sino en saber diseñar el mayor número de escenarios de combate posibles y encontrar la solución más eficiente a cada uno de ellos utilizando las técnicas de nuestro sistema. ¿Cómo reaccionaría si el adversario que agarra mi muñeca se encuentra enfrente de mí? ¿Y si se encuentra a mi lado? ¿O si me agarra la muñeca desde una posición a mi espalda? A partir de ahí, determinamos la respuesta más adecuada a cada escenario. Y esto, naturalmente, puede ser un proceso de prueba-error. Si los errores los cometemos en el kwoon, mejor que mejor, así no los sufriremos en la calle.

En un próximo artículo trataré más extensamente sobre otros factores que  afectan al tiempo de reacción así como de las herramientas y elementos que pueden contribuir a minimizar su influencia.

El Autor del Blog

martes, 22 de marzo de 2011

TEORIA DEL ENTRENAMIENTO QIGONG. Parte IV.

Volvemos a retomar los apuntes sobre teoría del Qigong que teníamos olvidados desde Noviembre del año pasado con esta nueva entrega. Para una mejor compresión de su contenido recomendamos repasar las anteriores entregas que podéis consultar en los siguientes enlaces:



Para el entrenamiento Qigong, es preciso comprender los principios en los que se sustenta nuestra práctica. Esos principios son la raíz, el fundamento de la misma, y es ese fundamento el que dará a luz los resultados que queremos. La raíz proporciona la vida, mientras que la ramas y flores (resultados) sólo aportan belleza temporal. Si conservamos la raíz, podremos volver a crecer. Si sólo contamos con ramas y flores, estas morirán en un breve espacio de tiempo.

Cada forma de Qigong tiene un propósito especial y una teoría. Si no conocemos ese objetivo y esa teoría, perderemos la raíz (significado) de la práctica. Por tanto, como practicantes de Qigong, debemos continuar reflexionando y practicando hasta comprender el fundamento de cada secuencia o forma.

Antes de comenzar a practicar, hay que entender primero que todo el entrenamiento se origina en nuestra mente. Es preciso tener una idea clara de lo que estamos haciendo y nuestra mente debe estar calmada, centrada y equilibrada. Esto implica también que nuestros sentimientos, percepción y juicio deben ser objetivos y precisos. Todo esto requiere equilibrio emocional y una mente clara. Ello requiere mucho trabajo duro pero una vez alcanzado ese nivel, habremos construido la raíz de nuestro entrenamiento físico y el Yi será capaz de dirigir nuestro Qi por nuestro cuerpo material.

Como se ha mencionado previamente, el entrenamiento Qigong comprende cinco elementos importantes: la regulación del cuerpo, la regulación de la respiración, la regulación de la mente, la regulación del Qi y la regulación del Shen (Espíritu). Todo ello constituye la base para tener éxito en la práctica del Qigong. Sin ese fundamento, nuestra comprensión del Qigong y nuestra práctica serán superficiales.
En esta entrada vamos a hablar sobre la regulación del cuerpo. Más adelante, trataremos más extensamente el resto de elementos.

LA REGULACION DEL CUERPO

Este proceso se denomina en chino “Tiao Shen”. Significa ajustar nuestro cuerpo hasta un estado de máxima comodidad y relajación. Esto implica que nuestro cuerpo debe estar centrado y equilibrado. De no ser así, podemos encontrarnos tensos e inquietos y ello afectará al juicio de nuestro Yi y la circulación del Qi. En círculos médicos chinos se dice que: “Cuando la forma (la postura del cuerpo) no es correcta, entonces el Qi no es fluido. Si el Qi no es fluido, el Yi (mente) no estará en paz. Y si el Yi no está en paz, entonces el Qi estará desarreglado.

Hay que entender que la relajación de nuestro cuerpo se origina en nuestro Yi. Por tanto, antes de poder relajar nuestro cuerpo, deberemos relajar o regular primero nuestra mente (Yi). A esto se le llama “Shen Xin Ping Heng”, que significa “Cuerpo y corazón (mente) equilibrados”. El cuerpo y la mente están mutuamente relacionados. Un cuerpo relajado y equilibrado ayuda a nuestro Yi a relajarse y concentrarse. Y cuando nuestro Yi esté en paz y sea capaz de juzgar las cosas con exactitud, nuestro cuerpo estará centrado, equilibrado y relajado.

La Relajación

La relajación es una de las principales claves para tener éxito en el Qigong. Es imprescindible tener en cuenta que al sosegarnos, todos nuestros músculos se relajarán y se abrirán todos los canales por los que circula el Qi. Para relajarnos, primero nuestro Yi debe estar relajado y en calma. Cuando el Yi se coordine con la respiración, nuestro cuerpo será capaz de relajarse.

En la práctica del Qigong existen tres niveles de relajación. El primer nivel es la relajación externa, física, o relajación postural. Se trata de un nivel superficial y casi todo el mundo puede alcanzarlo. Consiste en adoptar una postura confortable y evitar tensiones innecesarios a la hora de permanecer quietos o movernos. El segundo nivel es la relajación de músculos y tendones. Para ello debemos dirigir el Yi profundamente a nuestros músculos y tendones. Este tipo de relajación ayudará a abrir los canales por los que circula el Qi y facilitará que éste se hunda y se acumule en el Dan Tian inferior.

La etapa final es la relación de los órganos internos y la médula ósea. Recordar que sólo si somos capaces de relajar profundamente nuestro cuerpo será capaz nuestra mente de dirigir el Qi allí. Sólo en esta etapa es capaz el Qi de alcanzar cualquier sitio. La sensación en ese momento es la ser transparentes, diáfanos, como si nuestro cuerpo entero hubiese desaparecido. Si podemos alcanzar este nivel de relajación, seremos capaces de comunicarnos con nuestros órganos y emplear el Qigong para ajustar o regular los desórdenes del Qi que nos están provocando problemas. Y no sólo eso; también seremos capaces de proteger nuestros órganos más eficazmente y, por tanto, retardar su degeneración.

El Enraizamiento

En todas las prácticas de Qigong es importantísimo estar enraizado. Esto significa estar estable, equilibrado y en firme contacto con el suelo. Si queremos empujar un coche, tendremos que estar enraizados para que la fuerza que apliquemos sobre el vehículo se equilibre con la que ejerzamos sobre el suelo. Si no estuviésemos enraizados, al empujar el coche sólo nos empujaríamos a nosotros mismos hacia atrás y no podríamos moverlo. Nuestra raíz está formada por la raíz de nuestro cuerpo, centro, y equilibrio.


Yongquan
Antes de que podamos desarrollar nuestra raíz, primero debemos relajarnos y permitir a nuestro cuerpo asentarse, “hundirse poco a poco”. A medida que nos relajemos, la tensión que pueda existir en diversas partes de nuestro cuerpo se disolverá y encontraremos una posición cómoda en la que permanecer. Dejaremos de luchar contra el suelo para que sostenga nuestro cuerpo y aprenderemos a confiar en nuestra estructura corporal para sostenerse a sí misma. Ello permitirá que los músculos se relajen aún más. Desde el momento en que nuestro cuerpo no luche para permanecer de pie, nuestro Yi ya no “empujará hacia arriba” y nuestro cuerpo, mente y Qi podrán descender. Si dejamos al agua sucia asentarse tranquilamente, las impurezas se depositarán gradualmente en el fondo y el agua por encima se volverá clara. De la misma forma, si relajamos nuestro cuerpo lo suficiente como para afincarse y estabilizarse, nuestro Qi se hundirá hacia el Dan Tian inferior y el punto Yongquan situado en la planta del pie, y nuestra mente se clarificará.

Yongquan, punto del meridiano del riñón situado entre el segundo y tercer metatarsianos.

Para enraizar nuestro cuerpo debemos imitar a un árbol y hacer que crezca una raíz invisible bajo nuestros pies, lo que nos proporcionará unos firmes cimientos para mantenernos estables durante el entrenamiento. Esa raíz debe ser ancha a la vez que profunda. Naturalmente, nuestro Yi debe crecer primero porque es el Yi el que conduce el Qi. El Yi debe ser capaz de dirigir el Qi hasta nuestros pies y ser capaz de comunicarse con el suelo. Sólo cuando el Yi sea capaz de establecer esa conexión con el suelo, podrá nuestro Qi crecer más allá de nuestros pies y penetrar en el suelo para construir la raíz. El punto Yongquan es la puerta que permite al Qi comunicarse con el suelo.

Después de adquirir nuestra raíz, debemos aprender cómo mantener nuestro centro. Un centro estable, equilibrado, hará que el Qi se desarrolle de manera uniforme. Si perdemos ese centro, nuestro Qi no se dirigirá uniformemente. Para mantener nuestro cuerpo centrado, primero deberemos centrar nuestro Yi y luego armonizar el cuerpo con él. Sólo bajo esas condiciones tendrán su raíz las formas de Qigong que practiquemos. Nuestros centros mental y físico son las claves que nos permitirán conducir el Qi más allá de nuestro cuerpo.

El equilibrio es el resultado el enraizamiento y de estar centrado e incluye equilibrar el Qi y el cuerpo físico. No importa que aspecto del equilibrio estemos considerando, primero debemos equilibrar nuestro Yi, y sólo entonces podremos equilibrar el Qi y nuestro cuerpo físico. Si nuestro Yi está equilibrado, nos ayudará a realizar juicios precisos, y por tanto a corregir el curso del flujo de Qi.

El enraizamiento no sólo se refiere al cuerpo, sino que también se aplica a la forma o movimiento. La raíz de una forma o movimiento se encuentra en su propósito o principio subyacente. Por ejemplo, en algunos ejercicios de Qigong el objetivo es dirigir el Qi a la palma de las manos. Para ello, hay que imaginar que empujamos un objeto hacia delante manteniendo nuestros músculos relajados (Ver Nota). En este ejercicio, los codos deben estar abajo para generar la sensación de enraizamiento al empujar. Si elevamos los codos, perderemos la sensación de “intención” del movimiento, porque el empuje no sería efectivo si estuviésemos empujando algo realmente. En la medida en que la intención o propósito del movimiento es su razón de ser, tendríamos ahora un movimiento sin objetivo, y no habría motivo para dirigir el Qi de ningún modo en particular. Por tanto, en este caso, los codos son la raíz del movimiento.

Nota.- El verbo "imaginar" usado aquí significa crear mentalmente algo que tratamos como si fuese real. Si "imaginamos" empujar algo pesado, ajustaremos nuestra postura exactamente como si estuvieramos en realidad empujando algo pesado. Debemos "sentir" su peso, la resistencia a medida que ejercemos fuerza contra él, y la fuerza y contrafuerza en nuestras piernas. Si tratamos mentalmente nuestras acciones como si fueran reales, nuestro cuerpo también lo hará, y el Qi se moverá automáticamente de la forma más apropiada para esas acciones. Si solo "fingimos" que empujamos algo pesado, nuestro cuerpo y mente no considerarán la acción como real, y el Qi no se moverá con fuerza y completamente.

sábado, 19 de marzo de 2011

Cronica audiovisual del I Torneo Interprovincial de Kung-fu "Ciudad de Logroño"

Hace pocos informábamos de los buenos resultados obtenidos por nuestra Escuela en el I Torneo Interprovincial de Kung-fu "Ciudad de Logroño"; podéis consultar la noticia aquí. Para completar esa información os ofrecemos ahora un video resumiendo nuestra actuación en ese evento. Que lo disfrutéis.

miércoles, 9 de marzo de 2011

ULTIMAS NOTICIAS: Buenos resultados en el I Torneo Interprovincial de Kung-fu "Ciudad de Logroño"



El Domingo, 27 de Febrero de 2.011 tuvo lugar la primera edición del Torneo Interprovincial de Kung-fu "Ciudad de Logroño", en el Polideportivo Adarraga de la capital riojana, como anticipo del Campeonato de España que tendrá lugar el próximo mes de Junio, en Madrid.
Nuestra Escuela participó junto con selecciones de La Rioja, Madrid y Pais Vasco, en medio de un ambiente excelente tanto de público como entre los competidores y en el marco de una buena organización.
La importancia del evento quedo refrendada por la presencia de D. Alberto Cuesta Afonso, Director del Departamento Nacional de Kung-fu de la Real Federación Española de Karate y D.A., así como por el gran número de participantes.

Por parte de nuestra Escuela, la selección aragonesa, encabezada por Sifu Javier Marcos Bolsa, estuvo conformado por los siguientes estudiantes:

Jose A. Bernad Yago
Carlos Espada Royo
Ruben Romero Sevillano
David Lopez Vicaya
Carlos Lopez Diez de Durana
Jorge Gracia Vindigni
Adrian Bujedo Peña

El Torneo se abrió con el tradicional saludo de los competidores al público y a los Jueces y Mesa Arbitral (izquierda). 
Sin dilación, pasó a desarrollarse la competición de Formas (Tao-Lu) de Mano Vacia, tanto en categoría masculina como en femenina.
A continuación se presentaron las Formas de Armas, si bien sólo en categoría masculina.
 
La Selección Aragonesa

Cabe destacar la buena participación de todos ellos, lográndose por Ruben Romero y David Lopez la primera y tercera clasificación respectivamente en Formas de Mano vacia. En armas, fue David Lopez Vizcaya quien se alzó con el segundo puesto. Pese a los nervios que suelen aflorar ante una competición, todos mostraron un gran nivel.

En el centro Sifu Javier Marcos, a su derecha Ruben Romero
y a su izquierda David Lopez

Seguidamente tuvo lugar la Competición de Semi-sanda, donde es necesario advertir que sólo era la segunda vez que participabamos en esta modalidad. Los combates fueron duros y se sucedieron a modo liguilla en tres categorías: ligero, medio y pesado, y otra absoluta para las féminas.
En el peso ligero, Jorge Vindigni lo tuvo dificil al tener que enfrentarse a luchadores de más experiencia y perdió los dos combates que disputó. En el peso Medio, Ruben Romero sólo se hizo con la victoria en el segundo combate; no obstante, el primer enfrentamiento fue muy reñido hasta el final; y hay que tener en cuenta que su oponente pesaba 10 kilos más que él. En definitiva, no pudo pasar a la siguiente ronda por muy poco.

De la participación de nuestro equipo en este evento se ha hecho eco el Heraldo de Aragón, uno de los peridicos de mayor tirada local (podéis pinchar en la imagen para verla más grande):

 
En conclusión, podemos afirmar que la actuación de la Escuela Hung Sing Dragón Blanco fue muy buena.  Mas adelante iremos actualizando esta crónica con material fotográfico y audivisual que, ahora mismo, se está procesando.

Poco a poco vamos adquiriendo rodaje en el terreno de la competición y dejando pruebas de nuestro buen hacer. Desde aquí animamos a todos los estudiantes a participar en este tipo de torneos para ir cogiendo experiencia deportiva.

martes, 1 de marzo de 2011

LAS BOTELLAS DE TABACO: Botellas pintadas desde dentro, un arte único.

Nuestros amigos de ACACHI, Asociación Cultural Amigos de China, nos enviaron hace tiempo una presentación en Power Point con imágenes francamente espectaculares y que ahora queremos compartir con vosotros en nuestro esfuerzo por difundir la cultura que envuelve a las disciplinas marciales que practicamos.
A finales de la Dinastia Ming, el tabaco llego a China. Desde ese momento, las botellas de tabaco se desarrollaron gradualmente. La habilidad para trabajar con esas botellas floreció durante la Dinastía Qing, continuando desde entonces hasta hacerse hoy en día muy requerida.

Es una forma de arte única. Se utiliza una pluma delgada especialmente diseñada con una curva en la punta, la cual se inserta a través del cuello de la botella. Un artista consumado trabaja en el pequeño espacio de dentro y es capaz de grabar diseños vivos y caligrafia en la superficie interior de la botella. El resultado es una serie de exquisitas miniaturas de paisajes, bodegones, retratos y caligrafía que es el deleite de muchos coleccionistas.