miércoles, 31 de diciembre de 2014

CRONICA DEL VIAJE A CHINA (2014): 2ª PARTE


El entrenamiento y aprendizaje del Kau-Da siguió durante toda esa semana, que fue muy intensa, todos los días íbamos a la 13:00 al templo para estirar y repasar, la las 14:00 en punto llegaba el maestro, entrenábamos con él sin un minuto de descanso hasta las 15:00 y luego nos quedábamos repitiendo un rato la forma y hablando con los otros maestros que pasaban por el Hung Sing y aprovechando todo lo que podíamos.
En esos días me quedaron unas cuantas cosas muy claras:

Primero: El Choy Li fut en general y el Hung Sing Choy Li Fut en particular, es un sistema extremadamente efectivo, pensado para acabar con una pelea en uno o como mucho dos golpes y para ser eficaz contra más de un oponente. A veces puede ser visualmente muy estético, pero no tiene por qué serlo y desde luego esto no se puede ser un objetivo en sí mismo. La consecución de la potencia, la fuerza relajada, la ausencia de rigidez y el entendimiento más profundo del sistema, sí es un objetivo.

Segundo: Que hemos tenido suerte con el kung fu que nos ha llegado, tenemos unas buenas bases, tanto físicas, como de posiciones, técnicas y también de respeto. Visto lo visto por ahí en muchas otras escuelas, tenemos también una gran suerte de tener un maestro que se rige en la enseñanza por lo mismo que vimos allí. Nosotros jamás hemos pagado por un hacer un examen y jamás hemos pagado por aprender una forma en nuestra propia escuela, la única manera de que nuestro Sifu te enseñe una forma es que estés preparado para hacerla y que lleves bien entrenada la anterior. Dicho esto, lo de Foshan, respecto a las artes marciales en general, es otro nivel. Poniendo un símil baloncestístico nosotros seríamos una buena ACB y ellos la NBA, se puede pasar de una liga a la otra, pero el que es el mejor en la ACB es uno más en la NBA y esto es así.

Tampoco es cuestión de compararse y mucho menos con un Sifu como He Chao Hua, ya que los que tienen ese nivel son “maestros de maestros”, y hasta gente que lleva dando clase más de 20 años y de gran reputación van hasta allí a aprender, así que lo que hay que hacer es abrir bien los ojos y aprovechar al máximo.
Aquí os dejo un video recopilación de lo que fui grabando esos días y que muestra un poco lo que fue el entrenamiento con Sifu He Chao Hua, a veces una imagen vale más que mil palabras…



Por comentar algo del vídeo, por ejemplo, en el segundo 48 el Maestro hace una demostración de un movimiento y dice “bu hao 不好”, que significa que así no está bien, y a continuación lo hace como debería ser. Esto me parece muy significativo porque según vimos hay veces que la ejecución estética de un movimiento es buena, pero eso no significa que sea buen Choy Li Fut, sólo lo parece.

Por lo demás, dentro de lo que es el propio templo, tuvimos la suerte de coincidir, esta vez bastantes más días con Sifu Wong, el máximo responsable del Hung Sing Kwoon junto con el Maestro He. Una vez más, no deja de sorprenderme la cercanía y la naturalidad de estos maestros de tan enorme nivel. Ahora mismo no hay nadie por encima de este maestro en lo que a Hung Sing Choy Li Fut se refiere, como mucho habrá un par de Sifu que estén a su altura en King Mui y puede que otros dos o tres fuera de China (aunque un maestro que está fuera, incluso de gran nivel, nunca se considera tan importante como los que se quedan allí manteniendo la esencia en el lugar de origen), sin embargo es difícil encontrar a una persona más cercana y risueña que el Maestro Wong, si bien cuando habla o hace algo de Choy Li Fut emana una grandísima autoridad.

Como muestra de esto, un día, justo cuando ya nos íbamos, apareció otro Maestro en el Templo, no sabemos bien de qué estilo era, porque únicamente le vimos manejar un arma, el látigo, pero no el de 9 secciones, sino un látigo clásico, de cuero. Nos enseñó fotos de él actuando con el látigo por todo el mundo, así que se le podría considerar un especialista.
En cuanto sacó el látigo Sifu Wong no pudo resistirse a probarlo, al ser un arma nueva, tenía que empezar de cero, y lo hizo con la misma ilusión que un estudiante.
Aunque es bien cierto que en nuestra escuela también somos así, y todos los días al acabar de entrenar lo primero que hacíamos era hablar por internet con nuestro Sifu y hermanos, que siempre estaban deseosos de oir y ver lo que habíamos hecho, Rubén y yo nos quedamos estupefactos mirando al Maestro Wong, acostumbrados a ver en Europa a maestros que se dan tantos aires de grandeza y a oir “yo soy el Maestro, ¿Cómo vas a enseñarle al Maestro?” vimos como Sifu Wong cogía el látigo, escuchaba las explicaciones y, con la puerta abierta, porque allí lo de la puerta cerrada no existe, con nosotros grabando, con turistas entrando, se ponía a practicar como un principiante, se reía, con esa risa poderosa que tiene, y disfrutaba. Hay que decir que la calidad se impone y a los cinco minutos ya se pasaba el látigo por encima de la cabeza como si nada, lo hago yo y me saco un ojo. Pero lo más increíble al verle así es darse cuenta de que un gran maestro no tiene nada que demostrar, y los que se niegan a seguir aprendiendo, quizá lo hagan para esconder sus inseguridades o sus carencias

Para que se vea como fue la cosa, aquí os dejo un video (asombroso también como consiguen entrenar sin soltar el cigarro) en el que se ve al Maestro del látigo, a Sifu Wong y a Rubén practicando. En resumen, un día divertidísimo.


El regalo para Sifu Javier Marcos
Como no sólo de kung fu se vive, también nos dio tiempo a ver Foshan mucho mejor que el año pasado, subimos una pequeña parte de la montaña Xiqiao donde hay una Diosa Kuan Yin de 77 metros, no nos dio tiempo a verla entera, porque hay que pasar el día entero y nuestra cita diaria con Sifu He era justo a mediodía, por lo que es una visita pendiente ya que también allí está la casa donde nació Wong Fei Hung y su escuela donde enseñan danza del león.

Además visitamos la maravillosa pagoda del centro de la ciudad, volvimos a ver al Dios del Norte en el Templo de los Antepasados y fuimos a visitar los museos y tiendas de cerámica de la ciudad, donde encontramos el regalo perfecto de Navidad para nuestro Sifu, de parte de toda la Escuela Hung Sing Dragón Blanco, una preciosa figura que representa la danza del león con todo detalle.

Resultó que Foshan es, además de la ciudad de las artes marciales, la de la cerámica, sus Maestros Ceramistas son conocidos en toda China así que fue un motivo más para disfrutar del viaje.


Además de todo esto, teníamos especial interés en recibir un buen masaje que nos ayudará a sobrellevar el entrenamiento, así que le preguntamos a Sifu Wong acerca de unos carteles que había en el templo en el que se veía a varios de los maestros tratando a pacientes. Sifu Wong, amable como siempre, nos escribió la dirección de ese lugar, donde dan masajes y enseñan a darlos parte de los maestros de Hung Sing Kwoon, así que al día siguiente fuimos en busca del local, y así descubrimos otro lugar maravilloso del Hung Sing Choy Li Fut, el Hung Sing Tong… (CONTINUARÁ)

Para leer la primera parte de la crónica pinchar en el siguiente enlace:
Crónica del viaje a China (2014), 1ª parte 

martes, 23 de diciembre de 2014

¡¡FELICES FIESTAS!!

LA ESCUELA HUNG SING DRAGÓN BLANCO OS DESEA...


 
        ¡¡¡FELIZ NAVIDAD Y FELIZ AÑO NUEVO!!!

        MERRY CHRISTMAS AND A HAPPY NEW YEAR!!!

         圣诞快乐新年如意!!!

jueves, 18 de diciembre de 2014

CRONICA DEL VIAJE A CHINA (2014), 1ª PARTE


China. Y en mi cabeza una única idea, la de cumplir la promesa que habíamos hecho de volver a Foshan. No fue fácil, por muchas circunstancias, reunir todos los elementos necesarios para poder viajar de nuevo, pero a veces la voluntad y la suerte se alían y a finales de octubre pusimos rumbo hacia ese fascinante, mágico y a veces abrumador lugar.
Esta vez quisimos comenzar el viaje por la otra punta del país y antes de bajar al sur, ya conocido, pasamos unos días en Pekín. Es difícil describir una ciudad como esa, por su tamaño, su historia, su gente… merecería una crónica en sí misma, en Pekín se mezclan y confunden lo antiguo y lo moderno, el comunismo y el consumismo más exacerbado, los coches de lujo y las bicicletas más humildes, los nuevos millonarios y los campesinos que se acercan para buscar un futuro o para hacer turismo. Todos ellos son imprescindibles para entender la China de hoy y el conjunto es, sin duda, impresionante.
En la siguiente presentación se puede ver una pequeña muestra de todas las maravillas de esta increíble ciudad, la Plaza de Tiananmen, La Ciudad Prohibida, el Templo del Cielo, las Tumbas de los Emperadores Ming, La gran Muralla…
  
                           
Tras esos días en Pekín pusimos rumbo al sur cogiendo un tren de alta velocidad que cruza todo el país, una experiencia que recomiendo, las 8 horas se nos pasaron volando debido a la gran animación que había con gente yendo y viniendo y la cafetería con una buena variedad de menús, nos dimos unos cuantos paseos con el termo arriba y abajo (ya que hay agua caliente a disposición de todos para poder prepararte un té y unos fideos instantáneos en cualquier momento) y sobre todo disfrutamos del paisaje y del cambio progresivo que íbamos contemplando, del frio y las llanuras del norte, al calor y las montañas frondosas del sur

Y por fin llegamos a Foshan, y vuelta al entrenamiento. Esta vez llevábamos todo más organizado, pudimos avisar al Maestro del día de nuestra llegada y teníamos cogido el hotel a escasos minutos del Hung Sing Kwoon para poder aprovechar mejor el día, pero los nervios eran incluso mayores ¿Qué esperaría el Sifu de nosotros?
Fuimos al Templo temprano para dar una vuelta y ver las novedades, y lo primero que vimos al entrar fue el nuevo busto de Jeong Yim, que personalmente me gustó mucho, tiene fuerza y hace todavía más bonito el altar.

A las dos en punto, como cada día, llegó Sifu He, le saludamos y le dimos unos regalos que habíamos traído desde España, una placa de agradecimiento con los logos de nuestras escuelas y un banderín de parte de toda la Escuela Hung Sing Dragón Blanco. 

 









Y sin más dilación, comenzó el entrenamiento, primero nos hizo hacer, por separado, la forma de la caña (dan tiao) que aprendimos el año pasado, que yo hice de aquellas maneras y Rubén la verdad que muy bien. Luego nos pidió que hiciéramos algo los dos juntos, unas técnicas como el año anterior. Como no sabíamos muy bien que hacer nos decidimos por la forma de parejas del tigre y leopardo que habíamos estado entrenando estos meses en la Escuela, debió gustarle bastante porque tras pensarlo unos segundos, comenzó a enseñarnos una forma de mano vacía con algunos movimientos que nunca habíamos hecho y que tenían mucha dificultad.
Aunque, como nos sucedió la otra vez, no había nadie para ayudarnos a traducir, este año hemos conseguido hablar mucho más con el Sifu, parece que los años de estudio se van notando y nuestro chino ha mejorado (si bien sigue siendo muy rudimentario, nos falta aun mucho para hablarlo con fluidez…). Gracias a esto pudimos entendernos cuando nos contó que el nombre de la forma era el “Kau Da” (la pelea continua), una de las formas que creo el propio Jeong Yim, una forma pensada para defenderse y atacar simultáneamente a más de un oponente a la vez, y que nada tiene que ver con el “Sap Ji Kau Da” más allá de que ambas vienen de Foshan.
En esta forma, nos dijo el Maestro He, se encuentran todas las técnicas del Hung Sing Choy Li Fut, por lo que aprenderla es sólo un primer paso, lo importante es exprimirla.
La verdad es que la experiencia de este año ha sido absolutamente increíble, todavía mejor que la del año pasado, al estar dos semanas dedicados en exclusiva al entrenamiento, hemos podido tener muchísimo más contacto con Sifu He, creo que le gustó el hecho de que hiciéramos el esfuerzo de volver como habíamos dicho y no dejar lo del año pasado en una anécdota de “una vez estuve en China entrenando en el Templo Hung Sing”, y por ello se volcó en explicarnos y demostrarnos la increíble efectividad y poder del estilo.
Es difícil explicar todo lo que hemos vivido allí, sólo decir que fue un entrenamiento extraordinariamente intenso, donde pusimos todo de nuestra parte, primero para dejar en buen lugar a nuestra escuela y Sifu, pero también porque hay una cosa que me quedó muy clara desde el principio, para Sifu He, su kung fu no está en venta, no puedes pagar un curso carísimo para que te enseñe, creo que si alguien entrase en el Templo ofreciéndole dinero por una forma le echaría a la calle, su Choy Li Fut es algo que sólo puede ganarse con esfuerzo y respeto, y por esto mismo hay que dar lo máximo en cada momento.
Las semanas siguientes fueron pues, muy duras para los dos, si bien de distinta manera, a los dos nos pidió llegar a nuestro límite, pero nuestro límite está en distinto lugar, por lo que con Rubén fue muy estricto con las posiciones, la fuerza, las aplicaciones, la relajación... no le pasaba ni una. Conmigo en cambio fue mucho más suave en ese sentido pero me hacía repetir cada día la forma sóla delante de él (y quien más estuviera, pero eso ya lo narraré más adelante), cosa que me horroriza en mi propia escuela, no digo nada frente a la mirada seria y escrutiñadora de Sifu He.
Sifu He Chao Hua
 Aquel mismo día por la tarde ya empezamos a sentir auténtico dolor en las piernas, y aquello no había hecho más que empezar…(continuará)